Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano.
Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común.
Ojalá podamos ser tan porfiados para seguir creyendo, contra toda evidencia, que la condición humana vale la pena, porque hemos sido mal hechos, pero no estamos terminados.
Ojalá podamos ser capaces de seguir caminando los caminos del viento, a pesar de las caídas y las traiciones y las derrotas, porque la historia continúa, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo: hasta luego.
Ojalá podamos mantener viva la certeza de que es posible ser compatriota y contemporáneo de todo aquel que viva animado por la voluntad de justicia y la voluntad de belleza, nazca donde nazca y viva cuando viva, porque no tienen fronteras los mapas del alma ni del tiempo.
Mi Sala Amarilla obsequia a todos sus seguidores un calendario del 2024 de diseño exclusivo.
Esta nueva edición está ilustrada con juegos y juguetes tradicionales y presentada en tres formatos diferentes.
Si bien —como es costumbre en el blog— se irán publicando, con unos días de anticipación, las efemérides de cada mes con la imagen del calendario correspondiente, la idea es que ya puedan contar con los calendarios por adelantado.
¡Espero que les guste este regalo para recibir al nuevo año y que les sea de utilidad !
El juego de Tatetí es un juego simple, normalmente jugado con papel y lápiz en el que dos jugadores, uno con un símbolo X y el otro O deben conseguir colocar su ficha en línea en un tablero de 3×3, dicha línea puede ser horizontal, vertical o diagonal.
También es conocido como ceros y cruces, tres en raya (España, México, Ecuador y Bolivia), cerito cruz (en Cuba), michi (en Perú), triqui (en Colombia), cuadritos, juego del gato, gato (en Chile, Costa Rica y México), totito (en Guatemala), triqui traka, equis cero (en Honduras), la vieja (en Venezuela), tic , tac, toe (en Estados Unidos)
Se caracteriza por ser un juego de posición, por tener como objetivo llegar a una posición determinada con las piezas y de estrategia, ya que, es necesaria cualquier acción planificada previamente y llevada a cabo con el fin de conseguir el objetivo, alinear las fichas (García y Torrijos, 2002).
En la versión de papel el juego acaba cuando los casilleros fueron llenados, pero en la versión con fichas, consta de tres fichas por participante lo que permite continuar el juego hasta que alguien consiga alinear sus fichas en en forma vertical, horizontal o diagonal.
Los jugadores no tardan en descubrir que, si no cometen errores, el juego termina en empate sin importar con qué juega el primer jugador. Normalmente son los niños pequeños los que juegan al tatetí: cuando ya han descubierto una estrategia imbatible se pasan a juegos más sofisticados.
Origen del tatetí
Su origen es milenario. Durante las excavaciones del antiguo templo de Kurna (1400ac), en Egipto, se descubrió un tablero con un formato de rayas diagonales y horizontales y se encontraron tableros similares en el templo de KomOmbo (300ac). Se cree que los chinos lo jugaban en la época de Confucio (500ac) y hay tableros tallados en los asientos de algunas Catedrales de Inglaterra donde éste juego se hizo popular en el siglo XIV.
En la antigua Roma podemos encontrar un antecesor a este juego "el terni lapilli".
A juzgar por la cantidad de tableros de juego que se han hallado en restos arqueológicos repartidos a lo largo y ancho del Imperio, el terni lapilli debía ser muy popular. Grababan el tablero en piedra, baldosa o simplemente lo trazaban en el suelo. También necesitaban seis fichas, que podían ser piedrecillas, trozos de madera, semillas, huesos pequeños…
Además, existían variaciones en el tablero de juego. Unas veces estaba formado por 9 casillas, otras era circular y también podía ser cuadrado.
Jugando al tatetí en el Jardín
Este juego resulta interesante de ser introducido en el Nivel Inicial, en tanto es uno de los primeros en los cuales, además de considerar sus propios movimientos, los niños deben considerar los del otro, lo que los obliga a descentrarse.
Por otra parte, no requiere de materiales sofisticados ya que con un cartón rayado y fichas de colores (tres de uno y tres de otro), fácilmente puede ser fabricado por los propios niños.
REGLAS DEL JUEGO:
El primer jugador coloca la ficha en cualquiera de los casilleros del tablero.
El segundo hará lo mismo con su primera ficha.
Se continúa las otras jugadas respetando los turnos, si el jugador consigue alinear tres marcas del mismo tipo (en forma horizontal, vertical o diagonal), ese jugador hace ¡TA –TE – TI!
Si se marcan todas las celdas vacías, no hay ganador. El juego es un empate.
En la medida que van dominando el juego, puede complejizarse agregándole espacios y fichas al tablero: el famoso juego de "Cuatro en línea" no es más que un Tatetí más complejo.
El siguiente video fue registrado en el año 2012 por la maestra Lucrecia Evangelina Nievas, en la sala de 5 años de la Escuela N° 4185, Núcleo: 79 “Tte. Gobernador Benjamín Villafañe”. Paraje Peña Colorada, Oran, Salta. Esta actividad se realizó en el marco del Proyecto “El Juego y la alfabetización en la Educación Inicial: Enseñanza y evaluación de resultados”, implementado en escuelas rurales de la Provincia de Salta. Se trató de una iniciativa conjunta entre OEI – Buenos Aires, UNICEF y el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de Salta.
Estos niños conocen el juego, no es la primera vez que lo juegan, pero tienen diferentes dominios de él. Lo que se puede identificar como errores al jugar en realidad forman parte de las diferentes etapas que se suelen atravesar los niños en el proceso de aprendizaje del juego:
1. Juegan imitando lo que hacen otros y “reinterpretan” la regla, jugando “a su manera”.
2. No se preocupan por intentar ganar. Suelen modificar las reglas para seguir jugando. No lo identifican con “hacer trampa”.
3. Se inicia una cooperación incipiente. Se observa a otros niños, que colaboran en la partida desde afuera, diciéndoles lo que hay que hacer.
4. Codificación de las reglas. Se va produciendo una apropiación cada vez más objetiva de la regla.
5. Se apropian del sentido. Se dan cuenta de la estrategia, de la “gracia” del juego.
Haciendo clic en el enlace que acompaña esta imagen podrán jugar online al Tatetí
Tatetí de fácil construcción: simplemente con una lata y unos botones con imanes pegados
Otro muy sencillo con materiales que tenemos a mano: una bandeja plástica, tapitas y cinta negra.
Estos originales Tatetí combinados en madera y porcelana fría son otra opción para utilizar como souvenirs . (Haciendo clic en la imagen accederán a otros modelos)
Otra versión diferente, dentro de una caja y con piedras:
Y para habilidosas con la costura...
Lali desde su blog Pasitos de colores nos presenta este tatetí corporizado:
Y aquí otro modelo de Tatetí gigante (las fichas se adhieren con abrojo o imán)
En la página educ.ar encontrarán las instrucciones para armar este tatetí giratorio, con rollos de cartón y sorbetes: