Ojalá seamos dignos de la desesperada esperanza.
Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano.
Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común.
Ojalá podamos ser tan porfiados para seguir creyendo, contra toda evidencia, que la condición humana vale la pena, porque hemos sido mal hechos, pero no estamos terminados.
Ojalá podamos ser capaces de seguir caminando los caminos del viento, a pesar de las caídas y las traiciones y las derrotas, porque la historia continúa, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo: hasta luego.
Ojalá podamos mantener viva la certeza de que es posible ser compatriota y contemporáneo de todo aquel que viva animado por la voluntad de justicia y la voluntad de belleza, nazca donde nazca y viva cuando viva, porque no tienen fronteras los mapas del alma ni del tiempo.
Eduardo Galeano
¡Feliz 2024 a todos los seguidores de Mi Sala Amarilla!
Nos espera un nuevo año para seguir compartiendo proyectos.
¡Gracias por su acompañamiento!
Sandra Luz
Publicaciones relacionadas
⭐Teoría de los buenos deseos. Hamlet Lima Quintana
⭐“Ser feliz es una decisión”. Reflexión para el Año Nuevo. Fr. Mamerto Menapace
⭐La Bendición del dragón. Gustavo Roldán
Muchas gracias, seguro que este año sigues compartiendo proyectos y tantos temas que motivan a los docentes. Un abrazo.
ResponderEliminarMirian, gracias a ti por tu visita. Se te extrañaba...
EliminarQue tengas un buen año.
un abrazo.