Las bolitas, también conocidas como canicas, son juguetes clásicos que han entretenido a niños y adultos durante generaciones. Este juego, que requiere habilidad y estrategia, puede jugarse de diferentes maneras, pero la esencia es casi siempre la misma: lanzar una o varias canicas para intentar aproximarse a otras o a agujeros objetivo. Cuando se gana una mano se suelen tomar las canicas del otro jugador o de los jugadores contrarios.
Si bien en un inicio este juego se generaba con bolas de barro, de metal o arcilla, los tiempos han permitido que cada vez estas piezas sean más modernas y seguras.
Según la zona geográfica o país pueden recibir distintos nombres:
Argentina: Bolitas, canicas
Bolivia: Tijchi
Brasil: Birosca
Colombia: Chócolo
Costa Rica: Chócola
Cuba: Bola
Chile: Bochitas
Ecuador: Bola
El Salvador: Chibolas
México: Catota
Uruguay: Bolita
Venezuela: Metras
Alemania: Eine kline ball
Bélgica: Knikker
Estados Unidos: Marbles
Francia: Petite boule, billes
Grecia: Trigonaki-mpaz
India: Goti
Indonesia: Kelereng-gundu
Inglaterra: Marbles
Italia: Biglia
Holanda: Knikkeren
Portugal: Berlindes
Otros nombres: caniques, chivas, metras, boliches, bolillas, balas o balitas.
Historia y origen del juego
Si bien no se conoce el verdadero origen de las canicas su origen aparentemente se remonta hasta el Antiguo Egipto y la Roma Precristiana. En efecto, se han encontrado canicas presentes en la tumba de un niño egipcio de alrededor del año 3000 a. C. Los expertos han indicado que las canicas pasaron de ser un objeto funerario o religioso, a ser un juguete.
Se sabe también que en Creta los niños jugaban con canicas pulimentadas de materiales preciosos. En la Roma Antigua el juego era muy popular entre los niños, popularidad que perduró durante la Edad Media. Aún a principios del siglo XX algunas canicas fueron hechas de piedra.
Los griegos jugaban con astrágalos, bellotas, castañas o aceitunas que lanzaban a un agujero, mientras que los romanos lo hacían con nueces y avellanas (Gorris, 1976). También se han encontrado en restos arqueológicos: guijarros, huesos de frutas y semillas, bolitas de arcilla, etc. son los más remotos antecedentes de las canicas.
En algunas excavaciones realizadas en Indoamérica, se han encontrado montoncitos de canicas labradas de barro formando parte de ofrendas mortuorias.
En 1953, Víctor Hugo "Tito" Chiarlo, antiguo trabajador de una cristalería argentina de San Jorge, Provincia de Santa Fe, fundó junto a Domingo Vrech la fábrica de canicas Tinka, motivado por una máquina que llegó a la cristalería donde trabajaba, importada desde Italia. La empresa es la primera y única del rubro en Argentina.
Tipos de canicas
Existen diferentes tipos de canicas según el material y el tamaño:
- Agüita: De vidrio transparente sin adornos. Esta se considera la canica de vidrio de menor valor.
- Carey Venezolana: Amarillo, azul y rojo.
- Canica china: De vidrio blanco. En Colombia, Honduras y Perú: Lechera, En Argentina y Chile: Lecherita.
- Boloncho: Canica del doble o triple del tamaño normal. En Argentina: Bolon o "Terón" En Colombia: Bolínchon, Bolón, Potas o Piponchas, en México: Cacalota, Bombocha o Matalota, en Honduras: Bolonca, en Guatemala: Chimbombones o Chimbombolas, en El Salvador: Chirolón ó Chibolón. En Uruguay: "Bochón". En Venezuela: "Bolondrona". En Costa Rica: "Taponas"
- Canica petrolera: De vidrio sin adornos interiores y con colores algo opacos.
- Martas: Blancas con colores matizados.
- Tirito: Opaca y sin adornos.
- Trébol: Transparente con tres pinceladas de colores en su interior.
- Balin: De metal. En Argentina: " Fierrera " o "Acerito".
- Pepita: Canica pequeña, de la mitad de diámetro de una normal aproximadamente. En Guatemala: Chiripitas. En Puerto Rico: "Piques" - Ojos de gato: Canicas de tamaño normal pero con un diseño amarillo en el centro como los ojos de un gato.
- Bolinchonas: son aquellas que son de tamaño vulgar (sentido grande) para jugar a quebrarlas (partida en la que una mara bolinchona golpea otra hasta quebrarla). En Puerto Rico se le llaman "Bolones"
- Galaxia: Canica negro por lo general con lentejuelas o motivos brillantes de gran valor. En Argentina : "Picadas"
Cómo se juega a las bolitas o canicas
Al tratarse de un juego de puntería y precisión antes de empezar a jugar debemos saber cómo lanzar las canicas ya que el objetivo principal suele ser acertar a un blanco escogido. Entre las formas de lanzar podemos distinguir entre la usada en los torneos reglamentarios y la utilizada en la calle por lo aficionados.
La primera de ellas consiste en colocar los nudillos en contacto con el suelo, excepto el pulgar, y catapultar el dedo pulgar para que impacte con la canica, utilizando la punta del dedo índice.
|
Forma de lanzamiento reglamentaria |
La segunda es lanzar como se quiera. En ningún caso se admite el arrastre o acompañamiento como técnica para lanzar la canica. Observamos las formas más usadas.
Para jugar a las canicas se prefiere una superficie de tierra debido a que el pavimento impide realizar los agujeros para jugar algunos juegos además de que las canicas ruedan tanto que es difícil controlar en donde se quieren colocar. Normalmente son llevados a cabo en una superficie de tierra o albero, uniforme y lisa. Existen numerosas formas de jugar a las canicas, y distintos modos de lanzarlas, los cuales han ido surgiendo a lo largo de la historia.
Este juego no tiene límites edad, sin embargo, pero lo más recomendable es que niños pequeños no jueguen sin la supervisión de sus padres, ya que pueden golpear a sus compañeros con las canicas o, incluso, colocarlas en sus bocas.
Reglas (Tomadas de la Federación Mundial de Canicas)
- Dos jugadores compiten el uno con el otro y deben usar canicas de colores diferentes.
- El juego comienza lanzando una canica hacia el agujero. El jugador, cuya canica esté más cercana al agujero, decidirá quien comienza el juego.
- Una vez que todos han lanzado en su primera ronda, se determina aquel que más cerca del hoyo se haya quedado, el cual comenzará a lanzar la canica en la siguiente ronda.
- El jugador que antes introduzca la canica en el interior del hoyo será el ganador.
- La distancia entre la línea de lanzamiento y el agujero es de 7.5 m. El hoyo tiene que ser 9 - 11 cm de diámetro.
Algunas variantes de juego
Es una variante fácil y entretenida, destinada a los más pequeños. Se traza un círculo de unos 30 cm en el suelo y cada uno de los participantes coloca igual número de canicas en el centro (dos, tres, cuatro). Se sortean los turnos de salida y se inicia el juego con el objetivo de bombardear las bolas agrupadas en el círculo. Las canicas que salgan del círculo al recibir el impacto pasarán a ser propiedad del jugador que ha lanzado en esa tirada. El juego termina cuando el círculo queda vacío.
Antes de empezar a jugar debemos cavar en la tierra un pequeño hoyo de unos 8 cm. de diámetro por 3 de profundidad y distanciarlo a unos dos o tres pies de una pared o superficie vertical donde las canicas puedan rebotar. El primer jugador rebota una canica en dirección del hoyo, si la bola entraba allí se quedaba hasta que el próximo jugador tratara de hacer lo mismo. Si lo lograba había un empate. Si no lo lograba ya había perdido aquella canica. La idea era que la bola entrara en el agujero o el jugador perdía una canica.
Otra forma de bolita y hoyo consiste en lanzar bolas desde una distancia prudente en dirección del agujero en la tierra. Las bolas que no entran pierden y pasan a pertenecer al dueño de la bola que logra entrar.
Para empezar a jugar, la primera bola debe rebotar lo más lejos posible. El segundo jugador trata de acercarse a una distancia que medía extendiendo los dedos pulgar y meñique (la cuarta). Si no lo logra, le toca al próximo jugador, quien lanza su bola en dirección de una de sus víctimas. La bola a la que él logra aproximarse con su cuarta es la perdedora y pasa a su poder.
Este juego también requiere rebotar una canica en dirección de otra en el suelo con la diferencia de que el lanzador debe lograr que su bola choque con la otra. Mientras no haya choque las canicas continúan siendo rebotadas hasta que un lanzador logra que su bola choque con cualquiera de ellas. El afortunado recoge todas las canicas en la tierra comenzando así un juego nuevo.
Chili y cuarta es una combinación de estas últimas dos formas. Si un lanzador logra que su bola choque con la de su adversario y se detenga a menos de una cuarta, el perdedor tiene que entregarle dos bolas: una por el chili y la otra por la cuarta.
Para jugar al caldero se debe trazar un círculo en la tierra con una línea indicando el diámetro. En el centro se hace otro círculo más pequeño y a una distancia prudente de ellos una línea que será el punto de donde los jugadores lancen sus canicas tratando de acercarse al centro del caldero. La bola más cercana al centro es "la mano" y a su dueño le correspondía la oportunidad de tratar de sacar fuera del caldero (el círculo grande) una o más de las bolas cercanas a la suya. Para ello empuja la canica con el dedo índice catapultado por el pulgar en dirección de su víctima. El impacto de las dos bolas enviará la segunda fuera del caldero. Si no lo logra pierde el turno y le toca al segundo más cercano al centro y así sucesivamente.
Marcamos dos líneas convergentes en el suelo. Se trata de lanzar la canica lo más lejos posible pero dentro del camino. Gana quien consiga lanzar la canica más lejos sin salirse, la línea se considera dentro.
Podrán encontrar más variantes en este documento: Colección de Juegos Infantiles: Las Canicas.
Beneficios
Analizando el juego de las canicas desde diferentes puntos de vista, podemos deducir que conlleva la mejora de multitud de aspectos sobre sus practicantes como ya recoge Grunfeld (1978): coordinación óculo-manual, coordinación fina y coordinación dinámica de las manos; a los que añadimos: pensamiento táctico y estratégico, relaciones sociales y afectivas, y sensaciones kinestésicas de las manos al entrar en contacto con las canicas y con la tierra. Se fomenta además la práctica de juegos al aire libre
Fuentes:
No hay comentarios:
Publicar un comentario