29 dic 2023

Deseos para el nuevo año. Eduardo Galeano


Ojalá seamos dignos de la desesperada esperanza.

Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano.

Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común.

Ojalá podamos ser tan porfiados para seguir creyendo, contra toda evidencia, que la condición humana vale la pena, porque hemos sido mal hechos, pero no estamos terminados.

Ojalá podamos ser capaces de seguir caminando los caminos del viento, a pesar de las caídas y las traiciones y las derrotas, porque la historia continúa, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo: hasta luego.

Ojalá podamos mantener viva la certeza de que es posible ser compatriota y contemporáneo de todo aquel que viva animado por la voluntad de justicia y la voluntad de belleza, nazca donde nazca y viva cuando viva, porque no tienen fronteras los mapas del alma ni del tiempo.

Eduardo Galeano


¡Feliz 2024 a todos los seguidores de Mi Sala Amarilla!

Nos espera un  nuevo año para seguir compartiendo proyectos.

¡Gracias por su acompañamiento!

Sandra Luz


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27 dic 2023

Calendario 2024 para imprimir gratis

Mi Sala Amarilla obsequia a todos sus seguidores un calendario del 2024 de diseño exclusivo.

Esta nueva edición está ilustrada con juegos y juguetes tradicionales y  presentada en tres formatos diferentes.

Si bien como es costumbre en el blog se irán publicando, con unos días de anticipación, las efemérides de cada mes con la imagen del calendario correspondiente, la idea es que ya puedan contar con los calendarios por adelantado.

¡Espero que les guste este regalo para recibir al nuevo año y que les sea de utilidad !


Desde aquí podrán bajar los PDF:
              Calendario general 2024


    ➽Calendario individual (mes a mes) 2024



👀 IMPORTANTE: El calendario sólo puede ser utilizado para uso personal y no comercial. No está autorizada su reedición .


Si te gustó te invito a que apoyes mi trabajo aquí 👇
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26 dic 2023

Mensaje fin de curso 2023

 

Otro año lectivo que concluye y lo despedimos con el deseo de que podamos recuperar la fuerza y esperanza necesaria para iniciar nuevos proyectos.

☀️Felices y merecidas vacaciones☀️

👉Invito a docentes de inicial a leer la carta que comparto en esta publicación:



17 dic 2023

El juego del Tatetí

*Entrada reeditada

El juego de Tatetí es un juego simple, normalmente jugado con papel y lápiz en el que dos jugadores, uno con un símbolo X y el otro O deben conseguir colocar su ficha en línea en un tablero de 3×3, dicha línea puede ser horizontal, vertical o diagonal.

También es conocido como ceros y cruces, tres en raya (España, México, Ecuador y Bolivia), cerito cruz (en Cuba), michi (en Perú), triqui (en Colombia), cuadritos, juego del gato, gato (en Chile, Costa Rica y México), totito (en Guatemala), triqui traka, equis cero (en Honduras),  la vieja (en Venezuela), tic , tac, toe (en Estados Unidos)

Se caracteriza por ser un juego de posición, por tener como objetivo llegar a una posición determinada con las piezas y de estrategia, ya que, es necesaria cualquier acción planificada previamente y llevada a cabo con el fin de conseguir el objetivo, alinear las fichas (García y Torrijos, 2002). 

En la versión de papel el juego acaba cuando los casilleros fueron llenados, pero en la versión con fichas, consta de tres fichas por participante lo que permite continuar el juego hasta que alguien consiga alinear sus fichas en en forma vertical, horizontal o diagonal.

Los jugadores no tardan en descubrir que, si no cometen errores, el juego termina en empate sin importar con qué juega el primer jugador. Normalmente son los niños pequeños los que juegan al tatetí: cuando ya han descubierto una estrategia imbatible se pasan a juegos más sofisticados.

Origen del tatetí

Su origen es milenario. Durante las excavaciones del antiguo templo de Kurna (1400ac), en Egipto, se descubrió un tablero con un formato de rayas diagonales y horizontales y se encontraron tableros similares en el templo de Kom Ombo (300ac). Se cree que los chinos lo jugaban en la época de Confucio (500ac) y hay tableros tallados en los asientos de algunas Catedrales de Inglaterra donde éste juego se hizo popular en el siglo XIV.

En la antigua Roma podemos encontrar un antecesor a este juego "el terni lapilli".

A juzgar por la cantidad de tableros de juego que se han hallado en restos arqueológicos repartidos a lo largo y ancho del Imperio, el terni lapilli debía ser muy popular. Grababan el tablero en piedra, baldosa o simplemente lo trazaban en el suelo. También necesitaban seis fichas, que podían ser piedrecillas, trozos de madera, semillas, huesos pequeños…

Además, existían variaciones en el tablero de juego. Unas veces estaba formado por 9 casillas, otras era circular y también podía ser cuadrado.


Jugando al tatetí en el Jardín

Este juego resulta interesante de ser introducido en el Nivel Inicial, en tanto es uno de los primeros en los cuales, además de considerar sus propios movimientos, los niños deben considerar los del otro, lo que los obliga a descentrarse.

Por otra parte, no requiere de materiales sofisticados ya que con un cartón rayado y fichas de colores (tres de uno y tres de otro), fácilmente puede ser fabricado por los propios niños. 

REGLAS DEL JUEGO:
  •  El primer jugador coloca la ficha en cualquiera de los casilleros del tablero.
  •  El segundo hará lo mismo con su primera ficha.
  •  Se continúa las otras jugadas respetando los turnos, si el jugador consigue alinear tres marcas del mismo tipo (en forma horizontal, vertical o diagonal), ese jugador hace ¡TA –TE – TI!
  • Si se marcan todas las celdas vacías, no hay ganador. El juego es un empate. 
En la medida que van dominando el juego, puede complejizarse agregándole espacios y fichas al tablero: el famoso juego de "Cuatro en línea" no es más que un Tatetí más complejo.

El siguiente video fue registrado en el año 2012 por la maestra Lucrecia Evangelina Nievas, en la sala de 5 años de la Escuela N° 4185, Núcleo: 79 “Tte. Gobernador Benjamín Villafañe”. Paraje Peña Colorada, Oran, Salta.  Esta actividad se realizó en el marco del Proyecto “El Juego y la alfabetización en la Educación Inicial: Enseñanza y evaluación de resultados”, implementado en escuelas rurales de la Provincia de Salta. Se trató de una iniciativa conjunta entre OEI – Buenos Aires, UNICEF y el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de Salta.

Estos niños conocen el juego, no es la primera vez que lo juegan, pero tienen diferentes dominios de él. Lo que se puede identificar como errores al jugar en realidad forman parte de las diferentes etapas que se suelen atravesar  los niños en el proceso de aprendizaje del juego: 
1. Juegan imitando lo que hacen otros y “reinterpretan” la regla, jugando “a su manera”. 
2. No se preocupan por intentar ganar. Suelen modificar las reglas para seguir jugando. No lo identifican con “hacer trampa”.
3. Se inicia una cooperación incipiente. Se observa a otros niños, que colaboran en la partida desde afuera, diciéndoles lo que hay que hacer. 
4. Codificación de las reglas. Se va produciendo una apropiación cada vez más objetiva de la regla.
5. Se apropian del sentido. Se dan cuenta de la estrategia, de la “gracia” del juego. 
Haciendo clic en el enlace que acompaña esta imagen podrán jugar online al Tatetí

Ver análisis completo del juego en : https://oei.int/downloads/pdf 

Algunas ideas para construirlos:

Tatetí de fácil construcción: simplemente con una lata y unos botones con imanes pegados




Otro muy sencillo con materiales que tenemos a mano: una bandeja plástica, tapitas y cinta negra.


Estos originales Tatetí combinados en madera y porcelana fría son otra opción para utilizar como souvenirs . (Haciendo clic en la imagen accederán a otros modelos)


Otra versión diferente, dentro de una caja y con piedras:



Y para habilidosas con la costura...




Lali desde su blog Pasitos de colores nos presenta este tatetí corporizado:



Y aquí otro modelo de Tatetí gigante (las fichas se adhieren con abrojo o imán)


En la página educ.ar encontrarán las instrucciones para armar este  tatetí giratorio, con rollos de cartón y sorbetes:



Otros juegos tradicionales:

10 dic 2023

Aniversario de la entrega del Premio Nobel de Química al Dr. Luis Federico Leloir


 El 10 de diciembre de 1970 el Dr. Luis Federico Leloir recibe el Premio Nobel de Química de manos del rey Gustavo Adolfo de Suecia. El premio le fue otorgado por “el descubrimiento de nucleótidos azúcar y su rol en la biosíntesis de los hidratos de carbono” realizado en la década del 50. En sus fundamentos, la Real Academia de Ciencias de Suecia, resaltaba que “pocos hallazgos han tenido tanto impacto sobre la investigación bioquímica”.

Luis Federico Leloir nació en París en septiembre de 1906, pero a los dos años se trasladó a la Argentina, país que lo adoptó y donde desarrolló toda su carrera. Se graduó como médico en la Universidad de Buenos Aires a los 26 años y comenzó su carrera en el Hospital de Clínicas. En 1947, gracias al apoyo de su mentor Bernardo Houssay, se convirtió en el director del Instituto de Investigaciones Bioquímicas-Fundación Campomar, hoy conocido como Fundación Instituto Leloir.

En ese instituto, junto a un equipo de colaboradores, Leloir realizó descubrimientos que transformaron el conocimiento de la biosíntesis de polisacáridos, esenciales en procesos como la formación de glucógeno y almidón, componentes básicos de la vida.

Uno de los mayores aportes de Leloir fue el descubrimiento del “camino de Leloir”, una ruta bioquímica que detalla cómo el cuerpo transforma los azúcares en energía. Esta ruta describe el proceso mediante el cual la galactosa, un azúcar presente en los lácteos, se convierte en glucosa, esencial para el funcionamiento celular. Su hallazgo permitió comprender mejor cómo el organismo almacena y utiliza la energía de los alimentos, revolucionando el conocimiento sobre los hidratos de carbono.

Los avances de Leloir no solo aportaron conocimiento teórico. Fueron un paso fundamental para comprender enfermedades metabólicas y sus tratamientos, contribuyendo al bienestar de millones de personas en todo el mundo.

Cuando Leloir recibió el Premio Nobel en Estocolmo el 10 de diciembre de 1970, se mostró sorprendido y humilde frente a la magnitud de la distinción:

"El honor que he recibido excede, de lejos, mi expectativa más optimista", expresó. Con su estilo modesto, reconoció la labor de sus colaboradores y no dejó de destacar que su trabajo fue posible gracias al apoyo de sus colegas y de instituciones científicas argentinas.

A pesar de haber alcanzado el mayor reconocimiento en su campo, Leloir siguió siendo un hombre sencillo, centrado en la investigación y en la formación de nuevas generaciones de científicos.

Hoy, el legado de Federico Leloir sigue presente en la ciencia. Su "camino de Leloir" es estudiado en universidades de todo el mundo, y sus descubrimientos son una base esencial para las investigaciones actuales sobre el metabolismo y las enfermedades asociadas a los carbohidratos.

 Esta fecha en el Calendario Escolar nos invita a recordar y reconocer el valor de la Ciencia para el beneficio de la vida de las personas.