Texto dedicado a las abuelas

En Argentina  el Día de la abuela se festeja cada año en el segundo domingo de noviembre.

El origen de la fiesta surge como reclamo a ensalzar la figura tan importante de la abuela dentro de la unidad familiar. Su entrega hacia los demás es total y verdadera, llegando a hacer todo lo posible para que su familia viva feliz.

El  texto de esta entrada va dedicado:

-A  las abuelas que visitan mi salita, buscando nuevos juegos y entretenimientos para sus nietos.

-A todas aquellas que lo son biológicamente, como aquellas que lo son de corazón.

-A mi querida abuela María,  que recuerdo  con su transaprente mirada azul y su sonrisa tan dulce como los caramelos que siempre me ofrecía... 

♥ Mamá decide en tu niñez lo que mas te conviene. La abuela decide lo que más te divierte.
Abuelos y nietos gustan detenerse a observar las mariposas y hablar con los gatos. Las abuelas pasan de tu plato al suyo la verdura que no te gusta.

♥ Las abuelas "están de acuerdo" con las madres, pero consiguen cambiar un poco sus ideas.Una buena abuela deja que le cuentes todo el argumento de la película que también ella vio en televisión.Y además revela su sorpresa. A una buena abuela no le importa que subas a su cama a las dos de la madrugada.Con tal de que no te muevas.

♥ Una buena abuela nunca te besa si no quieres. La abuela escucha cuando nadie presta atención.

♥ Las abuelas siempre dicen "no importa cariño ya se te pasará, de verdad".Lo que hace a los abuelos especiales es que siempre están allí por nosotros.

♥ Si piensas es increíble que, de la mañana a la noche, una dama madura aprenda a sentarse en el suelo con las piernas cruzadas, a tocar un tambor de hojalata, graznar como un pato, cantar villancicos, hacer flores de papel, dibujar cerditos y coser ositos de peluche gravemente dañados.

♥ Las abuelas vienen en docenas de formas, racimos de arrugas, idiomas, vestidos, y grados diversos de envejecimiento. Pero siempre tienen el mismo amor en su interior.

♥ Deseo que en el mundo de cada niño, asustado, solitario, temeroso, enfermo o desconcertado haya un abuela hacia la que correr.
 (Desconozco su autor)

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