29 dic 2014

“Ser feliz es una decisión”.Reflexión para el Año Nuevo


"Mi percepción a medida que envejezco es que no hay años malos. Hay años de fuertes aprendizajes y otros que son como un recreo, pero malos no son. 
Creo firmemente que la forma en que se debería evaluar un año tendría más que ver con cuánto fuimos capaces de amar, de perdonar, de reír, de aprender cosas nuevas, de haber desafiado nuestros egos y nuestros apegos. Por eso, no debiéramos tenerle miedo al sufrimiento ni al tan temido fracaso, porque ambos son sólo instancias de aprendizaje. 
Nos cuesta mucho entender que la vida y el cómo vivirla depende de nosotros, el cómo enganchamos con las cosas que no queremos, depende sólo del cultivo de la voluntad. 
Si no me gusta la vida que tengo, deberé desarrollar las estrategias para cambiarla, pero está en mi voluntad el poder hacerlo. 
“Ser feliz es una decisión”, no nos olvidemos de eso. Entonces, con estos criterios me preguntaba qué tenía que hacer yo para poder construir un buen año porque todos estamos en el camino de aprender todos los días a ser mejores y de entender que a esta vida vinimos a tres cosas: -a aprender a amar -a dejar huella -a ser felices..."

 Extracto del texto de Fr.Mamerto Menapace, monje benedictino y escritor. 


A todos los amigos de Mi Sala Amarilla les deseo
que  puedan construir un buen año  
remontando sus sueños ,
cosechando alegrías
 y dando mucho amor.


22 dic 2014

¡Feliz Navidad!



Que pasen una hermosa Navidad riendo , amando, soñando ,disfrutando, ilusionándose y emocionándose como niños .
Muchas gracias por su acompañamiento en estos 5 años.
Un gran  abrazo
Sandra Luz

20 dic 2014

Carta de Papá Noel a todos los niños del mundo.


*Aporte de Lorena Pacheco, seguidora del facebook de Mi Sala Amarilla. Su autora es Claudia Padula.

Queridos amiguitos estoy muy contento de haber recibido las cartas que todos ustedes me enviaron.
 Sí, claro que las leí y sé de memoria la lista de juguetes que me pidieron. Una lista tan larga como el cuello de una jirafa y tan gorda como la panza de un rinoceronte. Pero quiero hacerles una propuesta y este es el motivo de mi carta.
Este año en lugar de ser yo quien reparta los regalos, he pensado que lo hagan ustedes, con un hermoso moño y envuelto en papeles multicolores, debajo del arbolito.
 Pero este año en vez de regalos comunes ¡vamos a repartir obsequios muy especiales! Por ejemplo:

Una mano amiga para quien tenga la mirada triste.

Nuestra compañía para quien espera en una cama de hospital.

Un par de zapatos mágicos para quien no tenga calzado.

Una vuelta en calesita, tomados de la mano para que el miedo desaparezca.

Una rebanada de pan con dulce para una pancita vacía.

Un abrazo fuerte al que llora, para borrar todas sus penas.

Alegría y amistad para el que esta solo.

Simplemente deseo que levantemos nuestras miradas hacia otros lugares para compartir nuevas experiencias, para ser un poquito mas solidarios con aquellos que lo necesitan.
Pintemos juntos el mundo con colores nuevos y brillos de justicia, responsabilidad y sobre todo mucho amor.   
PAPÁ NOEL





15 dic 2014

El pequeño abeto.Cuento tradicional


En la cima de un monte crecía un abeto que se quejaba sin cesar de sus hojas. A su parecer, un árbol de su categoría se merecía algo mucho mejor, no hojas puntiagudas y que pincharan.

¡Ojalá fuese de oro! – decía.

Y a la mañana siguiente despertó con las hojas de oro. Brillaba muchísimo. Y el brillo de sus hojas atrajo a unos ladrones que lo dejaron desnudo.


¡Qué equivocado estaba! – se dijo entonces. ¡Ojalá fuera de cristal!

Y a la mañana siguiente se despertó con las hojas de cristal. Pero un fuerte viento hizo que se golpearan unas con otras, hasta que nuevamente se quedó desnudo.

¡Qué equivocado estaba! – se dijo entonces. ¡Ojalá tuviera dulces y aromáticas hojas!

Y a la mañana siguiente tenía un montón de hojas dulces y aromáticas. Pero pasaron unas cabritillas y se las comieron todas, dejándole desnudo otra vez.

Ya desesperado exclamó: ¡Pobre de mí, qué equivocado estaba!

Y formuló entonces un deseo final: recuperar sus antiguas hojas.

Al día siguiente se despertó vestido con las hojas que le corresponden a un abeto y que aún hoy conserva. ¡Qué feliz era ya!

Al atardecer pasó por allí una pareja. Un hombre y una mujer embarazada. Estaban muy cansados del largo camino que habían recorrido y se refugiaron bajo las ramas del pequeño abeto. Allí pasaron la noche.

Por eso desde entonces, algunas familias colocan el nacimiento debajo del árbol de navidad.



Esta historia es ideal para contarle a los niños en  época navideña.  Además puede ser una buen recurso para representarlo en la fiesta de fin de curso.
Como todo cuento tradicional tiene múltiples versiones.

Al finalizar se puede cantar un villancico navideño, por ejemplo "El abeto", villancico popular alemán , que tiene una letra muy sencilla:
Qué verdes son, 
qué verdes son 
las hojas del abeto. 

En Navidad 
qué hermoso está 
con su brillar 
de luces mil. 

Qué verdes son, 
qué verdes son 
las hojas del abeto. 

Sus ramas siempre 
airosas son, 
su aroma es 
encantador. 

Qué verdes son, 
qué verdes son 
las hojas del abeto.

Aquí pueden escuchar una hermosa versión interpretada por Andrea Bocelli:



Estrella Ramón , narra otra versión muy interesante del cuento "El pequeño abeto".






En el siguiente documento de Edebe podrán encontrar otra adaptación ilustrada con actividades complementarias.

https://edebe.com/educacion/documentos/

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La historia de Rodolfo el reno


6 dic 2014

Proyecto Diccionario de Juegos


Comparto esta original propuesta creada por alumnos de la carrera de Ciencias de la Comunicación Social de la de la Universidad de Buenos Aires.

Se trata de  un diccionario digital que recopila juegos inventados, aportados por  fans que apoyaron  la iniciativa vía Facebook y Twitter .


Esta  atractiva antología de juegos, que está acompañada con bellísimas ilustraciones, tiene el objetivo de  difundir el beneficio de jugar e inventar juegos en familia, ya que en esta acción "se crean códigos que duran a través del tiempo y crean un mundo compartido entre padres e hijos".

En el diccionario figuran  juegos únicos e inventados entre padres e hijos, juegos que no requieren de tecnología, sino el uso de la imaginación, las ganas de jugar y de compartir un momento especial entre los miembros de la familia.

Los invito a verlo en su versión digital haciendo clic en la siguiente imagen y también en este álbum: https://www.facebook.com/



Considero que esta excelente propuesta puede ser tomada de modelo para incorporar en los Jardines a través de la elaboración un libro viajero , armado con los aportes de las familias y que pueda circular en los hogares de cada niño.


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